Holguín dice: “Los animadores no somos locos queremos llevarle alegría a un pueblo que lo necesita”

Escrito por: Alexis Beltre

Michael Miguel dice que con el caso de Bebeto será el tiempo que traerá reconciliación entre ambos

Una producción para chuparse los dedos; esta vez sí faltó tiempo.  Michael Miguel Estrella por siempre; la música del Chuape, el género típico de gala con El Prodigio y al cierre concierto con el gran propulsor del movimiento en el género salsa en el país Víctor Waill.  Quédate que tu vas a ganar Con Domingo y Pachá

Es hoy por hoy una de las principales figuras de la comunicación en el mundo del entretenimiento, Michael Miguel Holguín ha sido un luchador constante para lograr sus propósitos y precisamente al presente poder estar acariciando el éxito como animador de televisión.

“Se ha cogido mucha piña, agria por cierto, pero bien, ha sido un proceso bueno pero muy largo, nos sentimos bien, en este momento estoy feliz, feliz”, aseguró Holguín.

En este conversatorio con los anfitriones Domingo y Frederick, en el segmento Estrella por Siempre, no podía dejarse de tocar el impasse surgido entre él y el productor Alberto Bernabé (Bebeto), a lo que sin nunca mencionar su nombre, Michael Miguel señaló:  “de lo que se trata esto es de que los sentimientos es una cosa especial y a mí me hirieron mis sentimientos y eso no lo negocio, y nadie me puede obligar a negociar eso.  El cristiano perdona obviamente, pero si somos hermanos, la chercha es otra cosa, pero somos hermanos y yo no te puedo maltratar a ti ni tú tampoco a mí.  La televisión por más atractiva que sea no puede opacar mis virtudes, ni mis amores, ni mis pasiones”.

“A la persona que tú te refieres siempre fue mi hermano pero….. qué hago? Pero pudiera aparecer el perdón como dice El Pachá? pregunta Domingo Bautista, y Michael Miguel responde: “si pero no ahora, porque no podemos tampoco con los sentimientos volvernos sinvergüenzas, eso es bueno dejar que el proceso vaya depurándose por sí solo, tranquilo, en un momento determinado de la vida sí, pero tranquilo porque ese tipo de choque hay que dejarlo que se limpie tú no puedes forzar eso, el corazón no se fuerza”, precisó Michael Miguel Holguín.

Esto no fue sólo el encuentro entre grandes figuras de la televisión y amigos, sin quizás los mejores animadores de televisión del país: Domingo, Michael y Frederick, fue además un compartir y un “chock” de bonitos sentimientos de hermandad entre colegas.

“Mi éxito tiene una primera razón de ser y es que pude estar al lado de un hombre impecable que es Domingo.  Domingo es una persona y eso lo sabemos todos sus amigos, Domingo no es mediocre, ni es mezquino y te deja volar y Domingo me dejó volar y yo volé”, así se expresó Michael Miguel en una tarde cargada de buenos sentimientos protagonizada por tres grandes de la animación televisiva en el área.  Fue así como no faltaron las lagrimas de el Pachá motivada por este reencuentro con su amigo y colega Michael.

Sobre los animadores de TV

“En un momento determinado el pueblo dominicano entendía que uno es un loco viejo, un gallo loco y eso duele, justamente por eso, por esa imagen de gallo loco, yo le puse a esta carrera todo mi amor, toda mi seriedad, toda mi entereza, toda mi integridad, todo lo que yo soñé se lo me ti con todas mis fuerzas a eso, para que el pueblo dominicano que yo amo me valore como un profesional, como un animador.  Un animador es un comunicador que decidió al entretenimiento, nosotros no somos locos, nosotros queremos llevarle alegría a un pueblo que lo necesita”, dijo Holguín.

Esta fiesta que es Con Domingo y Pachá inició con un toque de juventud y la presencia de El Chuape, el reporte peculiar que hace cada semana Trompo Loco; y entre rifas y concursos Manny y Jatnna en contacto con la gente en las redes sociales para llegar al estelar de la música típica El Prodigio, y aprovechando la presencia de Michael Miguel en los estudios de Color Visión se le invitó a presentar al artista reservado para el cierre como se guardan las cosas de lujo: el sabor tropical que pone la salsa de Víctor Waill.

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