Escrito por: Ruben Peralta (cocalecas)
Cuando en el año 2000 nos presentaron el primer largometraje
de los “X-Men”, lanzaron a la fama a un actor y a un conocido comic de la
compañía Marvel, que 13 años después, sigue dando sus frutos. Este personaje es
Wolverine y este actor es Hugh Jackman.
“The Wolverine” es la segunda película en solitario de este
carismático personaje de Marvel, ambas desgraciadamente y en mi opinión, muy
mal llevadas. Esta última entrega peor que su predecesora. Cabe aclarar que
“The Wolverine” no es secuela de “The Wolverine: Origins”, sino de las tres
películas anteriores a esta. Al parecer fue tan mala que la quieren dejar en el
olvido. No lo digo yo, con sus acciones lo comprueba Marvel (Es más, yo también
lo digo).
En esta ocasión el sufrido y desesperado Wolverine, (que aún
no termino de entender como alguien con estos poderes puede ser tan miserable y
tan sufrido), está vagando por las calles a raíz de la muerte de su amada Jean
Grey y es buscado por un magnate japonés para agradecerle años después por
haberlo salvado de una muerte segura. Luego de esta premisa sigue una mezcla
entre película de acción de los 70 y un aburrido drama familiar.
Hugh Jackman está bien, él ES Wolverine. Es igual en todas
sus representaciones, es difícil diferenciar cuando está bien o mal en este
papel, ya que es inerte. Parte del problema de esta película es que tiene
tantas historias alrededor, tantos personajes secundarios, tantas subtramas,
que no sabes por dónde agarrarla. Es impresionante el grado de complicidad que
se están dando estos guionistas, con tramas tan sencillas y atractivas.
Entre tantos personajes secundarios, sobresale la nobel
actriz Tao Okamoto en su papel de la depresiva y enamorada Mariko. Creo que es
lo más sobresaliente en cuanto a actuación en dicha película.
La dirección de James Mangold resulta algo confusa. Como ya
dije, quiere contar tanto que termina por no hacer nada y llevar algo más que
mediocre a la pantalla. ¿Cual es la necesidad de tantos flashbacks con Jean
Grey? ¿Por qué el drama familiar? James, ¿podrías explicarme ese absurdo final
con ese absurdo twist? Son tantas preguntas que realmente no vale la pena
repetir la película en búsqueda de respuestas.
Más que correctos efectos especiales, un cuidado diseño de
producción puede ser el punto más alto de esta película.
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